jueves, 17 de noviembre de 2011

 



Un encuentro con Dios

Léase Léase Génesis 28.10-17
Jacob dijo: «Ciertamente Dios está en este lugar y yo no lo sabía».
Estaba sentada en el aeropuerto. El ruido alrededor parecía un enjambre de abejas. Abrí El Lugar de Encuentro (la edición rusa de El Aposento Alto) y comencé a leer, observando a quienes me rodeaban al
mismo tiempo. Estaba sentada en el área de llegada, donde vi expresiones de amor y gozo a medida que amistades y familiares se encontraban. Entonces un maravilloso pensamiento vino a mi mente: ¡Estoy leyendo El Lugar de Encuentro en un «lugar de encuentro»!
No sabía cómo resultaría la reunión de negocios a la que había venido. Pero comprendí que a menudo me pregunto cómo sería un encuentro con Jesucristo. ¿Qué ocurriría si Jesucristo viniera ahora mismo? ¿Qué sentimientos experimentaría? ¿Estaría lista? ¿Estaría avergonzada de algunas de mis obras, pensamientos o palabras?
Mientras exploraba mi libro de meditaciones, me sorprendió cómo me había separado de la atmósfera agitada que me rodeaba. Me estaba reuniendo con Dios. Mi reunión no había comenzado, pero la reunión más importante ya había ocurrido.

Autor

Sa. Yulia Parygina (Pskov, Rusia)

Pensamiento para el día

¿Todavía no he me he encontrado con Dios hoy?

Oración

Señor, danos sabiduría y un corazón amoroso de manera que cada momento de nuestra vida estemos listos para encontrarnos contigo. Amén.
oremos
Por el personal de los aeropuertos.

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jueves, 17 de noviembre de 2011

 



Un encuentro con Dios

Léase Léase Génesis 28.10-17
Jacob dijo: «Ciertamente Dios está en este lugar y yo no lo sabía».
Estaba sentada en el aeropuerto. El ruido alrededor parecía un enjambre de abejas. Abrí El Lugar de Encuentro (la edición rusa de El Aposento Alto) y comencé a leer, observando a quienes me rodeaban al
mismo tiempo. Estaba sentada en el área de llegada, donde vi expresiones de amor y gozo a medida que amistades y familiares se encontraban. Entonces un maravilloso pensamiento vino a mi mente: ¡Estoy leyendo El Lugar de Encuentro en un «lugar de encuentro»!
No sabía cómo resultaría la reunión de negocios a la que había venido. Pero comprendí que a menudo me pregunto cómo sería un encuentro con Jesucristo. ¿Qué ocurriría si Jesucristo viniera ahora mismo? ¿Qué sentimientos experimentaría? ¿Estaría lista? ¿Estaría avergonzada de algunas de mis obras, pensamientos o palabras?
Mientras exploraba mi libro de meditaciones, me sorprendió cómo me había separado de la atmósfera agitada que me rodeaba. Me estaba reuniendo con Dios. Mi reunión no había comenzado, pero la reunión más importante ya había ocurrido.

Autor

Sa. Yulia Parygina (Pskov, Rusia)

Pensamiento para el día

¿Todavía no he me he encontrado con Dios hoy?

Oración

Señor, danos sabiduría y un corazón amoroso de manera que cada momento de nuestra vida estemos listos para encontrarnos contigo. Amén.
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