martes, 3 de julio de 2012

Apariencia de belleza

                                         EL APOSENTO ALTO

Apariencia de belleza

Léase 1º de Samuel 16.1-7
View the Julio-Agosto, 2012 Issue
Dios le dijo: «La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón.»
- 1º de Samuel 16.7 (NVI)
Durante la reconstrucción de nuestra casa de casi 200 años, los trabajadores cubrieron una pared con una lona azul para impedir que entrara el aire y para controlar el polvo. Cuando mi nieto de cuatro años vio la lona, exclamó: «Abuela, ¡qué bonito!». Tuve que reírme. Lo que para los adultos es poco atractivo, él lo percibió como hermoso.
Sospecho que Dios nos ve como mi nieto vio la lona. Cuando vemos a alguien nos concentramos mucho en su vestimenta o en su apariencia. Podemos suponer que la persona es rica o pobre. Podemos juzgarnos a nosotros mismos, sintiéndonos aceptables o inaceptables, según nos miremos.
Sin embargo, Dios mira cómo somos en nuestro interior y nos ve tal como somos en realidad, al igual que nuestro valor pleno. En la medida que sirvamos a Dios y a otras personas, nos convertiremos en personas hermosas tanto en nuestro interior como en nuestro exterior.

Autor

Sa. Sandra Vaughn (Pensilvania, EE. UU.)

Pensamiento para el día

Dios nos ama y nos acepta sin mirar nuestra apariencia.

Oración

Amado Dios, gracias por aceptarnos y amarnos tal como somos. Ayúdanos a ser más y más como Cristo. En su nombre oramos. Amén.

OREMOS: Por los obreros de la construcción.

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martes, 3 de julio de 2012

Apariencia de belleza

                                         EL APOSENTO ALTO

Apariencia de belleza

Léase 1º de Samuel 16.1-7
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Dios le dijo: «La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón.»
- 1º de Samuel 16.7 (NVI)
Durante la reconstrucción de nuestra casa de casi 200 años, los trabajadores cubrieron una pared con una lona azul para impedir que entrara el aire y para controlar el polvo. Cuando mi nieto de cuatro años vio la lona, exclamó: «Abuela, ¡qué bonito!». Tuve que reírme. Lo que para los adultos es poco atractivo, él lo percibió como hermoso.
Sospecho que Dios nos ve como mi nieto vio la lona. Cuando vemos a alguien nos concentramos mucho en su vestimenta o en su apariencia. Podemos suponer que la persona es rica o pobre. Podemos juzgarnos a nosotros mismos, sintiéndonos aceptables o inaceptables, según nos miremos.
Sin embargo, Dios mira cómo somos en nuestro interior y nos ve tal como somos en realidad, al igual que nuestro valor pleno. En la medida que sirvamos a Dios y a otras personas, nos convertiremos en personas hermosas tanto en nuestro interior como en nuestro exterior.

Autor

Sa. Sandra Vaughn (Pensilvania, EE. UU.)

Pensamiento para el día

Dios nos ama y nos acepta sin mirar nuestra apariencia.

Oración

Amado Dios, gracias por aceptarnos y amarnos tal como somos. Ayúdanos a ser más y más como Cristo. En su nombre oramos. Amén.

OREMOS: Por los obreros de la construcción.

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